Las Octavas Jornadas sobre fotografía comenzaron este lunes con la conferencia Más luz. Una revalorización del trabajo de Alexander Wolcott y su cámara de espejos a cargo del historiador y conservador norteamericano Grant Romer. Presentó los resultados de una reciente investigación acerca del fotógrafo Alexander Wolcott (1887 -1943), considerado internacionalmente uno de los primeros norteamericanos en producir exitosamente retratos utilizando la técnica del daguerrotipo y en establecer un comercio fotográfico en Manhattan.
A través del estudio de la trayectoria personal de este fotógrafo, su acceso a la tecnología de la época y los efectos sociales de su labor, Romer aporta al entendimiento del progreso y transformación de los procesos fotográficos en sus albores históricos, además de revalorizar a un autor al que considera olvidado por la historia de la fotografía hecho que le genera una "verdadera tristeza".
En este sentido, se refirió a las peculiaridades técnicas empleadas por Wolcott ya que la cámara que este utilizaba no tenía lentes, sino que funcionaba por un sistema de espejos que empleaba el principio de reflexión telescópica de Newton. Este fue el primer equipo de fotografía patentado en el mundo -la Cámara Wolcott-, en Nueva York en 1840. Romer concluyó su exposición señalando que "la fotografía es un milagro y todavía estoy maravillado".
Seguidamente la investigadora brasileña Georgina Quintans presentó "Retratos de Familia: el camino de la memoria y su dimensión simbólica" donde se propone abordar "un panorama representativo de la aristocracia de la caña de azúcar de Pernambuco (nordeste del Brasil) " entre 1860 y 1910. La autora trabaja sobre fondos fotográficos de la Colección Francisco Rodrigues – Fundaj/PE (Brasil) y se centra en la representación de la aristocracia dueña de la explotación de la caña de azúcar, el poder patriarcal y la esclavitud.
Para abordar esta investigación, la autora se pregunta "¿por qué somos retratados?¿por qué guardamos fotografías?" y explica que para ella "fue un encanto ir al archivo a ver fotos de personajes anónimos" donde tuvo que aprender los códigos visuales que surgían de los silencios de los personajes, de sus trajes y performance. En el intentó de encontrar el poder simbólico que esas imágenes podían brindarle, sintió esencial entender el retrato en tanto una "donación, una herencia para el otro". Los archivos para Quintans estaban "adormecidos".
En cuanto a los álbumes de familia en sí mismo recalcó el uso que se les daba en su época: "eran como perlas que estaban en la mesa del living para que los vieran los invitados. Eran una forma de obtener estatus social y representaban lo que pertenecía a la familia; personas, objetos, etc".
Quintans resaltó la presencia de imágenes de personas de raza negra en el archivo y en particular de un singular daguerrotipo donde un hombre es retratado y sus joyas (collar y anillos) son pintados de dorado para resaltarlos. Esta pieza aparece sin datos que puedan ayudar a identificar al individuo y su rol en la sociedad de la época. Por lo más controvertida, esta imagen inspira a la investigadora en su búsqueda.
Samuel Salgado, director del Centro Nacional del Patrimonio Fotográfico-Universidad Diego Portales, presentó el libro Historia de la fotografía. Fotógrafos en Chile 1900-1950 de Hernán Rodríguez Villegas, publicado en 2011, -para el cual Salgado trabajó como ayudante de investigación- que cuenta con una publicación como antecedente que comienza en 1985 centrada en la segunda mitad del siglo XIX.
Refiere a la metodología de la que parte esta investigación, siendo de la revisión sistemática de archivos y colecciones fotográficas en repositorios públicos y anticuarios durante un periodo de seis años.
El libro identifica autores y problematiza determinadas temáticas y situaciones, como el concepto de autoría o el pensar la historia de la fotografía a partir de los archivos y sus criterios internos de sistematización y priorización de información. La investigación comprende las prácticas de los fotógrafos aficionados, asociados a Foto Club, una de las modalidades más extendidas en Chile hasta la actualidad. Asimismo la fotografía de estudio y las estrategias y propuestas estéticas que planteaban en su preocupación por diferenciarse unos de otros. El expositor enseña fotografías de algunos de los autores comprendidos en la investigación, explicando las características de sus respectivos trabajos y destaca lo difícil de abordar la fotografía de género debido a la falta de material.
Indexfoto consultó a Samuel sobre la existencia o no de constantes en las búsquedas y propuestas de los fotógrafos en el período abordado. La respuesta del investigador fue que si bien su libro no parte de un estudio cronológico, sí puede ubicar algunas constantes, como la necesidad de mantener un retrato de estudio y una autorepresentación. Asimismo la carrera permanente por estar al día con las novedades técnicas y en encontrar propuestas novedosas, en el afán de una competencia comercial.
La investigadora argentina Laura Malossetti presentó Lugares de la fotografía en la lucha por los derechos humanos en Argentina donde propuso trabajar sobre la fotografía en la historia contemporánea. Al respecto planteó la necesidad de entender los retratos en torno a una "encrucijada problemática" entre la historia, la memoria y el arte contemporáneo.
En especial referencia a la última dictadura argentina, Malossetti explicó que, con respecto a los detenidos-desaparecidos, se trabajó en pos de la "negación del individuo y su deconstrucción en la masa". En respuesta a ello, planteó que se han creado tres estrategias, de parte de las organizaciones de derechos humanos, para devolverles su identidad que constan en darles un nombre, ponerles un cuerpo y darles un rostro.
La investigadora reconoció el carácter complejo de las fotografías de los detenidos-desaparecidos en tanto "representan el tiempo congelado, la nostalgia. Son imágenes de la esperanza y de la incertidumbre". En su exposición Malossetti hizo especial referencia al uso que de las mismas han hecho los artistas plásticos y al respecto dijo que "el trabajo del arte contemporáneo es el de iluminar, conmemorar y llegar a las generaciones futuras".
Andrés Garay (Perú) presentó La sociedad arequipeña y su complicidad con el retrato fotográfico. 1895-1920, en ella hizo referencia al libro que publicó junto con Jorge Villacorta. La investigación aborda el desarrollo de la fotografía en el sur peruano en el cambio de siglo del XIX al XX, a partir del surgimiento de los estudios o galerías fotográficas, con énfasis en Arequipa.
La práctica fotográfica más extendida en ese contexto era el retrato fotográfico, por lo que Garay expone los diferentes ejemplos de retratistas del sur peruano. Entre los autores citados se encuentra Carlos Heldt, cuya obra de retrato se da a conocer por primera vez en esta ponencia. Otros de los autores abordados e identificados en el estudio presentado son Max T. Vargas, los hermanos Carlos y Miguel Vargas y Martín Chambi.
El primer día de las [Jorndas :8] finalizó con la entrevista a Teresa Siza (PT) por Magdalena Broquetas (UY) del CdF. La primera pregunta de Broquetas apuntó al desempeño de Siza en el Centro Portugués de Fotografía y las razones sobre su posterior alejamiento de esta institución pública. La fotógrafa refirió a las características de esa institución, a sus colecciones, a las políticas de conservación y de promoción de actividades. Señala que la autonomía que fue perdiendo es de los motivos principales por los que definió su alejamiento. En perspectiva se considera conforme con su desempeño allí, aunque reconoce que en su momento no impulsaron suficientemente la formación hacia afuera.
A lo largo de la entrevista Siza transmitió su experiencia en esa institución pionera dedicada a la fotografía. Finalmente Broquetas le pidió su opinión, como conocedora de la fotografía en general, sobre a dónde mirar en este momento en materia fotográfica, con lo que Siza respondió que el futuro está en Sudamérica, tanto por la masa crítica como por las posibilidades de obtener recursos. También refirió al “poder” dentro de los espacios fotográficos y sus riesgos.
Indexfoto consultó a Siza sobre qué aspectos en la enseñanza le hubiera gustado promover desde el Centro de la Imagen de Portugal. La fotógrafa respondió que nunca tuvieron la idea de hacer una escuela. Sí promovieron talleres de enseñanza, que considera fundamentales porque brindan la posibilidad de tomar contacto con personas que son referencia. Agrega que uno de los principales aportes fue el fomento en materia de visionado de portafolios, que desde el 2002 se promovió mucho desde el Centro de la Imagen y que no tenía precedentes en Portugal.