El taller de Preservación de Colecciones Fotográficas es coproducido por el Centro de Fotografía y la Universidad Católica del Uruguay y se articula en 2 módulos. El primero se concentra en el desarrollo de las tecnologías específicas de los procesos fotográficos, desde el daguerrotipo hasta la inyección de tinta. El segundo se ocupa de la organización y administración de colecciones de fotografía.
Fernando Osorio se ha formado en Ciencias y Artes de la Imagen en el Instituto Tecnológico de Rochester, Nueva York y es miembro activo del Consejo Consultivo del sistema Nacional de Fototecas (MX) y del Subcomité de Tecnología del Programa Memoria del Mundo (UNESCO). Actualmente se desempeña como Director de Conservación de las Colecciones de Fotografía de la Fundación Televisa.
Osorio será el encargado de cerrar la actividad académica de las Sextas Jornadas sobre Fotografía, con la conferencia titulada "Conservación sustentable y responsabilidad de custodia en la era de la imagen digital", el miércoles 8 de diciembre a las 21hs. en el Salón Azul de la Intendencia de Montevideo.
A continuación transcribimos fragmentos de la entrevista realizada en Montevideo en diciembre de 2009.
Patrimonio Audiovisual
Todos los elemento de la tabla periódica conforman compuestos químicos que constituyen las sustancias con las que se han hecho las fotografías, es decir, los plásticos, los rollos de las películas, el papel de las fotografías impresas, todo sobre lo que se soporta la imagen. Como estos elementos se fabrican con cosas orgánicas e inorgánicas tienen una interacción con el medio ambiente y "viven"; viven más y viven mejor o viven menos y viven peor si no se le conserva, si no se le tienen cuidados. Se trata de objetos frágiles, pero como han entrado dentro del proceso de mercadotectnia y de consumo de un bien consumible, no han tenido el ciudado que se merecen. Ahora que la fotografía y lo audiovisual es tan inmportante par la formación y el desarrollo de la cultura visual moderna es cuando empezamos a re-ponerlo en valor y lo consideramos un patrimonio audiovisual.
La conservación
Hay dos vertientes. Una es la conservación integral de los materiales audiovisuales y otra es la investigación y las tareas curatoriales de un investigador. En primer lugar nadie puede conservar lo que no entiende, y lo que no quiere. Tenemos que formar gente que viene de las disciplinas de la conservación y la restauración, pero enfocada a materiales nuevos y contemporáneos. Y "nuevos" es el S.XIX y desde 1980 se han estructurado programas, seminarios, encuentros de estos especialistas para desarrollar la disciplina de la permanencia de las imágenes o de la conservación. UNESCO, por ejemplo, en el '78 planteó la necesidad de conservar lo audiovisual e hizo una recomendación a los estados miembros en Belgrado, la famosa recomendación de Belgrado. Lo mismo ocurrió hace algunos años, quizás seis o cuatro años, donde tuvo lugar una recomendación sobre la preservación de la memoria digital. Es decir, hay que tomar medidas para que todo -no importa el soporte, no importa la plataforma- se conserve.
Entonces por un lado hay que formar a personas que entiendan qué son esos materiales que hay que conservar. Y por otro lado hay que trabajar de la mano, de manera multidisciplinaria, con investigadores de la tecnología y con investigadores de la parte curatorial, esto es, saber para qué mostrar la fotografía y qué uso se les va a dar. Usualmente decimos en el campo de la conservación que conservamos y preservamos para dar acceso y tenemos que equilibrar esas 3 tareas.
Los proyectos no van a conseguir dinero exclusivamente para conservar, guardar y congelar. Nos van a dar el dinero para que conservemos y congelemos pero también para que utilicemos esos materiales, a través de exposiciones, de publicaciones. Yo siempre he pensado una exposición o un proyecto museográfico en términos de un proyecto de publicación; es como hacer un libro o másdifícil. Ahora bien, las exposiciones de fotografía incluyen, desde ahora en adelante, una pantalla de plasma con imagen en movimiento. Ya no podemos hablar de que los conservadores de foto van a saber solamente de foto. Ahora tienen que saber de fotografía, de audiovisual, de sonido, de video, de cine... porque todo este corpus de la imagen sobre soportes tiene un papel importantísimo en la formación de la cultura visual moderna.
Las nuevas tecnologías de la imagen no tienen palabra de honor. Trata de abrir un disco syquest o un zip. Indefectiblemente tienes que tener el lector. Para todos los materiales leídos por una máquina tienes que tener la máquina y ésta tiene que estar en buen estado. Pensemos en los Umatic 3/4 (ay! fabuloso! todo lo vaciamos a 3/4!). ¿Y ahora qué va a pasar?
Se trata de una cuestión muy importante que es también paradigmática. Michel Frizot plantea que hay un régimen fotográfico. Yo pienso que también hay un régimen audiovisual. Tenemos que conocer a fondo la tecnología para que entonces podamos entender a fondo la imagen. En los años '60s se empieza a dar parmiso (a hacer espacio en el microscopio electrónico de barrido) para ver un daguerrotipo. Lo que sabemos ahora de la conservación de cintas de audio de carrete abierto, de videocintas o audiocintas de metal evaporado, lo supimos más rápido porque tuvimos más personas en la investigación, o por lo menos, poniéndole atención a la -tan cambiante- tecnología. Ahora bien, sabemos mucho de por qué pasan las cosas, pero no sabemos cómo componerlas. Sabemos que las fotografias se oxidan y que se les ve espejeo de la plata o plata dicroica. Pero no sabemos como reponer esa plata (todavía).
Saber lo que se tiene para saber cómo conservarlo
Hay que hacer conservación pasiva, hay que hacer preservación. Un catálogo es una herramienta de preservación. Hay que tener el control físico y el control intelectual para que entonces puedas tener el acceso garantizado. Al tener control físico tienes control de la conservación o sabes cómo está la conservación, esto es, qué procesos se están desarrollando en la fotografía, en la película o en el video. Y para eso se necesita de un ejército viendo y catalogando imágenes. El control intelectual es parte de la documentación y requiere a otro especialista; una gente muy culta, con muchísimos conocimientos de historia, de cultura general, de literatura. Es quien va a hacer el catálogo, quien va a decir: "esta fotografía es de este tema". Y se convierte en un investigador, es decir, alguien que hace documentación para la investigación.
La forma de la memoria ha cambiado desde que hay imágenes y no sólamente fotográficas, sino también litográficas, grabados, pinturas. Pero se ha acelerado a partir de la posibiliad de la reproducción. Entonces tenemos que volver a evaluar cómo utilizar las imágenes, ya no como los ilustradores de un texto sino el texto a partir de la imagen. Así es como veo la función de un archivo o de una coleccion audiovisual.
América Latina
Ha habido esfuerzos muy importantes en todos los países, aunque hay siempre un grupo importante catalizador. En Uruguay, obviamente la existencia del Centro de Fotografía por el hecho de que haya un lugar que tenga una actividad, que tenga una galería, marca una presencia y es un actor del patrimonio. Chile ha tenido la iniciativa del Centro de Preservación Fotográfica. Allí se levantó un inventario, un catastro. En Brasil hay un Centro de Preservación. También en Argentina ha habido un grupo que a desarrolló una labor de reunión o conexión entre los diferentes archivos o colecciones. Aquí la cuestión es que no es suficiente.
De mi punto de vista es necesaria una política cultural de estado y no un progama de gobierno. La conservación -de lo que sea- debe estar a nivel de política cultural de Estado y debe decir en la ley que tal institución se funda, que debe darse el dinero necesario (ya sabemos que hay que negociar muchas veces los presupuestos). Debe de haber una protección del patrimonio, una vigilancia de que patrimonio esté cuidado, que no se apague el switch de la luz, porque no hay dinero para pagar el aire acondicionado. Y eso sucede. Entonces necesitamos que haya un reglamento, una ley que diga no va a suceder. Eso es lo que los organismos multinacionales como UNESCO recomiendan. Todos tenemos a nuestros países representados en la UNESCO y tenemos embajadores que suscriben recomendaciones. Hagámoslas efectivas por favor señores senadores, señores diputados. Y si no tenemos a los senadores y diputados en esto, hay secretario de la cultura, un responsable de la cultura. Tiene que haber información para formar el patrimonio. De otra manera, vamos a tener pérdidas. Y vamos a llegar a levantar bloques de material cinematográfico, ya no películas de material cinematográfico.
Hay esfuerzos interesantes que requieren de mayor cooperación y de mayor apertura e intercambio. Ahora existe una relación norte-sur (con los canadienses, norteamericanos) más abierta. Necesitamos esos contactos que son, muchas veces, contactos personales. El mundo de la conservación de lo audiovisual es chico. Si no se es miembro de la Asociación Internacional de Archivos de Sonido y Audiovisual, de la IASA, o de la FIAF o de la FIAT, y si no se va de vez en cuando -o no te patrocinan tu presencia- en el Instituto Interamericano de Conservación, cada 2 años en la famosa reunión de invierno, se queda afuera de la posibilidad de hacer los contactos. Ello contribuye a buscar la cooperación del medio diplomático e instituciones para hacer seminarios, visitas técnicas y estar pendiente de recomendaciones de UNESCO y así encaminar una política cultural de Estado.